ESTADOS UNIDOS

¿Cuánto alcohol se necesita para intoxicarse? Muchas personas se imaginan que unas pocas cervezas en un partido de béisbol o un par de copas de vino con la cena no harán que superen el límite legal permitido para conducir. Pero la forma en que el alcohol afecta a las personas es algo sumamente individual, en lo que intervienen varios factores.

Tomar tragos de alcohol con rapidez llega al flujo sanguíneo más rápido que sorber vino lentamente. Beber con el estómago vacío afecta los reflejos más que consumir alcohol con comida. Y las mujeres y los bebedores de edad más avanzada alcanzan los niveles de intoxicación más rápido que los hombres o las personas más jóvenes.

Las bebidas carbonatadas suben los niveles de alcohol más rápido, porque el gas irrita la membrana que recubre el estómago, lo que hace que el alcohol sea absorbido más rápidamente. (Las bebidas alcohólicas dulces o con cafeína no son absorbidas más rápidamente, simplemente parece que así fuera porque la gente suele consumir más cantidad de lo que se da cuenta).

Muchos asiáticos tienen una estructura genética que hace que tengan una aceleración del ritmo cardíaco provocada incluso por una pequeña cantidad de alcohol.

Y factores como la fatiga, el estrés, la enfermedad y la depresión pueden magnificar el impacto del alcohol.

Eileen Wolter conducía de regreso a su casa luego de una fiesta de Navidad con sus colegas de la oficina que había organizado en 1998. "Sin dudas estaba muy estresada", dice. Había tomado varios cócteles y unas copas de vino, y había comido muy poco, pero pensaba que estaba bien, hasta que dobló demasiado rápido y chocó con una señal de tránsito. Estaba conduciendo con un neumático pinchado y con una rueda rota, lo que causó un daño todavía mayor a su auto. Un auto de la policía se detuvo para ver si se encontraba bien, y no pasó un test de alcoholemia. "El resultado fue 0,9", señala Wolter, que fue arrestada, debió pagar una multa de US$2.000 y fue condenada a realizar servicios comunitarios y a tomar clases sobre el alcohol.

"No me lastimé, solamente me sentí humillada, enojada y asustada. Lidiar con todo eso -y el hecho de que podría haberme lastimado o haber lastimado a otra persona- me hicieron dar cuenta del riesgo estúpido que había corrido", dice Wolter, una escritora de 40 años y madre de dos niños que afirma que nunca volverá a tomar de esa forma y a conducir.

Los bebedores que creen que pueden darse cuenta de cuando tomaron suficiente, suelen están equivocados. "El alcohol puede afectar sus reflejos, incluso si se siente bien", dice Samir Zakhari, director de la división de metabolismo y efectos en la salud del Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo de EE.UU.

Esa es una razón clave por la que muchos expertos instan a la gente que planea beber alcohol, sin importar la cantidad, a que se abstenga de manejar.

En EE.UU., es ilegal que los adultos manejen con una concentración de alcohol en su sangre (BAC, por sus siglas en inglés) que supere 0,8%, valor que representa el porcentaje de alcohol en el flujo sanguíneo. Para los conductores de menos de 21 años, cualquier nivel de alcohol es ilegal.

El límite legal, que llegó a ser tan alto como 0,15% en algunos estados, hoy es de 0,8% en los 50 estados de ese país. Algunos expertos todavía consideran que es un nivel generoso. Los tiempos de reacción comienzan a volverse más lentos con sólo la mitad de esa cantidad, y gran parte del mundo impone límites más estrictos. En China el límite es 0,2%, en la mayor parte de India es 0,3% y en gran parte de Europa es 0,5%.

Muchas comunidades planean sumarse a una ofensiva en todo EE.UU. contra los conductores alcoholizados entre el 19 de agosto y el 11 de septiembre. Incluirá patrullaje de saturación y controles de sobriedad, especialmente la noche.

Esos esfuerzos han ayudado a reducir las muertes por accidentes de tráfico vinculadas al alcohol en EE.UU. casi 50% desde 1980, aunque el número se ha estancado en los últimos años en casi 11.000 muertos anuales, lo que equivale a un tercio de todas las muertes que se producen en las autopistas.

¿Cómo funciona el BAC? Uno de los factores más importantes es qué tan rápido se consume el alcohol, dice Zakhari. Primero va al estómago, después al intestino delgado, donde es absorbido por el flujo sanguíneo y llevado al hígado, donde es metabolizado por las enzimas hepáticas.

"El hígado solamente puede procesar el alcohol a un ritmo de un trago por hora", dice Zakhari.

Es poco probable que consumir una bebida lentamente a lo largo de una hora emborrache a una persona, dice. Pero superar esa cantidad, o consumir ese mismo volumen más rápidamente, desbordará al hígado. El exceso de alcohol "va al flujo sanguíneo y a cada órgano del cuerpo, incluyendo el cerebro", dice.

Una vez que eso ocurre, sólo el tiempo puede neutralizar los efectos, dice Zakhari. El BAC suele bajar a un ritmo de 0,015% por hora tanto para hombres como mujeres, pero volverá a subir si se sigue bebiendo. Beber café, darse una ducha o mojarse la cara con agua fría podrá hacer que se sienta más alerta, pero no cambiará su nivel de alcohol en sangre.

Consumir comida junto con el alcohol hace que este sea absorbido más lentamente, dado que una válvula en la base del estómago se cierra para permitir la digestión. Eso ocurre antes de que se permita el pasaje del alcohol. En caso de que el alcohol no se detenga por ese proceso, viaje al intestino delgado y al hígado a mayor velocidad.

Lo que coma junto con el alcohol no incide demasiado en la concentración de alcohol en la sangre. La grasa en, por ejemplo, un bistec, vuelve más lento el pasaje de la comida a través del intestino, pero solamente hasta cierto punto. De la misma manera, beber leche antes de consumir alcohol va a tener un efecto insignificante en los niveles sanguíneos.

El peso importa más que la altura. A igual peso, la diferencia de altura no cambiará el efecto del alcohol. Pero un hombre de mayor peso tendrá un BAC menor luego de consumir la misma cantidad de alcohol El cuerpo de las mujeres también tiende a tener menos agua que el de los hombres, lo que implica que la misma cantidad de alcohol generará una concentración mayor en la sangre.

La edad también influye. Los hígados de las personas de más edad metabolizan el alcohol más lentamente que los de los más jóvenes. Pero el exceso de alcohol puede hacer más daño a los cerebros más jóvenes, dado que algunas porciones del mismo todavía se están desarrollando, en particular aquellas que gobiernan el control de los impulsos y las funciones ejecutivas.

Los ciclos menstruales de las mujeres son otro factor. El metabolismo del alcohol se incrementa alrededor de 10% después de la ovulación... The Wall Street Journal Americas?

FUENTE:      Banca y Negocios

http://www.bancaynegocios.com/salud-y-deportes