MEXICO

Soy de Villahermosa, tabasco y soy alcohólico. Empecé a beber a la edad de 16 años, dejé la bebida cuando tenía 26, dure 10 años encadenados al infierno del alcoholismo.

Soy el primero de 3 hermanos, hijo de un padre y madre alcohólicos, recuerdo que en aquellos tiempos difíciles, empecé a tomar el ejemplo de mi padre, lleno de miedos, ansiedades, baja autoestima empecé a destrozar mi vida.

Llegué a pensar que era normal el tomar, porque lo veía principalmente en mi familia y luego en las sociedades. No veía lo malo que hacía esta enfermedad, al principio tomaba sin motivo alguno, en ocasiones para agradar a los amigos, en muchas veces a las mujeres, era una persona llena de miedos que cuando andaba sobrio no podía entablar una conversación normal, tenía que estar tomando para agarrar valor y solo así podía hablar y acercarme a las mujeres. Primero era uno o dos días por semana,  como fui creciendo empecé a tomar casi diario hasta llegar a un punto que llego a fascinarme, de tal manera que empezó a afectarle a mi familia. Mi padre ya había dejado la bebida, empezó a llegar a un grupo de auto ayuda de 4to y 5to paso, luego fue mi madre y le siguió mi hermana menor.

Yo seguía en mi "Vida Feliz", que así lo llamaba yo, cegado por el alcoholismo y mis miedos nunca veía cambios en mi familia, decía que estaban locos, que yo en cualquier momento podía dejar de beber y así lo hice, pero mis actitudes seguían igual, una persona soberbia, orgullosa, neurótica, falta de amor propio, estaba lleno de tantos defectos que no me dejaban vivir plenamente feliz.

Mi padre me seguía insistiendo que fuera a vivir la experiencia en el grupo de 4to y 5to paso, le decía: que no lo necesitaba, que yo estaba muy bien así.

Pasaba el tiempo y yo me seguía enterrando en mi propio infierno, tomando diario, robando para comprar alcohol, lastimando a mi familia y amigos.

Cuando estaba solo en mi cuarto, empezó la depresión, lloraba por nada, que nadie me quería, hasta pensé en salirme de mi casa y yo según era feliz.

Hasta que un día empecé a ver cambios en mi hermana menor, ella ya había ido a la experiencia de 4to y 5to paso. Y una voz dentro de mí me decía que ya era hora de cambiar mi vida y decidí vivir la experiencia.

Asistí a mis pláticas y llego el día de ir a la esperada experiencia. Fueron los 3 días más complicados de mi vida porque me enfrente a mí mismo, el darme cuenta lo que realmente era y lo mal que yo vivía, me quede con la boca abierta y me dije ¿ese soy yo?

Luego de vivir la experiencia de 4to y 5to paso, era una persona diferente, una manera diferente de ver la vida, el enfrentar los problemas diarios, todo había cambiado dentro de mí, todo fue gracias a un poder superior y a la decisión que tomé en querer cambiar mi forma de vivir.

Realmente supe cual era mi problema y cómo comprender a los demás, gracias al programa de alcohólicos anónimos. Comencé a recuperarme mental, física y espiritualmente. Asistir a mi grupo de 4to y 5to paso, el devolver ese servicio a quienes me ayudaron, recompensar a mi familia, amigos y a los que les hice daño, claro está que nada es fácil, los problemas son los mismos, el que cambio fui yo.

Hasta el día de hoy vivo felizmente con mi familia, cambiando poco a poco mis actitudes y aplicándome al grupo de 4to y 5to "Despertar a la Vida".