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Publicado por daniel 07/08/2009 19:39 / 0 Comentarios Ver nota completaEnviar nota a un Amigo

Testimonio de la mujer de un ex-alcohólico

Dejo el testimonio de una mujer, mi madre, que ha querido compartir con vosotros su opinión al respecto con una carta que me ha entregado, "por si sirve de ayuda", como dice ella:

 

Quiero dar mi testimonio al foro que conozco a través de mi hijo: mis vivencias con una persona alcohólica, mi marido.

 

El alcoholismo es una enfermedad reconocida por el ministerio de salud y se ha tenido que reconocer como tal, supongo, porque de hecho afecta a partes de nuetro organismo como puede ser el hígado, riñón, etc. A mi entender es una enfermedad adquirida por la persona en cuestión, es decir, es una enfermedad donde el problema es no saber decir NO.

 

En principio cuando bebes tiene un efecto agradable, desenfadado y divertido. Te invita a la relación fácil de amigos, eres más ocurrente y espléndido, lo cual ya te está engañando a tí mismo, ya sientes que tienes un cambio de personalidad, digamos que inconscientemente te invita a seguir bebiendo. Así tu mente te va anulando tu voluntad.

 

Nadie se hace alcohólico por una borrachera en navidad si después entrenas tu mente y tu voluntad a decir NO y no seguir con el mismo hábito cada día y con un poco más en cada dosis.

 

Yo lo sé después de convivir con un enfermo alcohólico durante unos cuantos años, donde mi vida era un infierno y la del enfermo un caos.

 

Acudí a las terapias de familiares afectados por el alcoholismo y mi marido a las de alcohólicos anónimos. Allí aprendí paralelamente a mi marido a recuperarme: él a recuperarse de la bebida y yo a entender su hábito y sus pautas de consumo con respecto al alcohol. Como bien se sabe toda la familia se deteriora.

 

En el año 87 mi marido dejó de beber. Desde entonces llevamos una vida tranquila y llena de amor. No obstante, Antonio, mi marido, en el año 2000 sufrió una angina de pecho, y en 2005 un infarto. Estuvo en el hospital haciendo una rehabilitación y allí fue cuando los médicos le aconsejaron beber vino tinto en la comida con moderación. A partir de ahí empezaron de nuevo mis miedos.

 

Afortunadamente mi marido tiene una voluntad fuerte , y si toma ( no todos los días lo hace) lo hace del mismo modo que se toma sus pastillas para su enfermedad cardiaca, es decir, en su justa medida.

 

El alcohólico, según su naturaleza, puede ser agresivo. Cada uno tiene unas características. En el caso de mi marido se había convertido en un vegetal y sin embargo yo era más agresiva. No comprendía como una persona se podía estar muriendo en vida, como descuidaba su aseo físico, no atendía ni se fijaba en su hijo ni en su mujer que le amaba locamente. Estaba amenazado de despido en el trabajo, no hacía caso a las personas que le querían, tenía lagunas mentales... todo en un estado vegetativo espantoso. Pero hoy somos felices gracias a la ayuda ofrecida en las terapias a la cual hemos asistido durante al menos 5 años. Hemos pasado mensajes a otras personas con el mismo problema que nosotros y, por supuesto, el problema desapareció porque fue mi marido quien decidió volver a tomar las riendas de su vida.

 

FUENTE:
 Las Drogas/Foro

http://www.lasdrogas.info/foro/viewtopic.php?t=857

 


Publicado por Fisac 9:06 AM / 0 Comentarios Ver nota completaEnviar nota a un Amigo
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