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Publicado por daniel 02/05/2008 21:49 / 0 Comentarios Ver nota completaEnviar nota a un Amigo

Vuelve a casa

CHILE

Vino mi hija a este mundo un día de primavera, el 27 de septiembre de 1985, nos perteneció por 20 años, se fue de nuestra vida el día de aniversario de nuestro matrimonio, el 28 de febrero de 2006.

 

Nos desgarro el alma cuando sonó el teléfono aquella tarde de domingo (26 de febrero), en ese mismo instante nuestra vida cambió. No sé, no podría definir con palabras cuantos grados giró, pero me sentí como un trompo que rodó en el tiempo y cayó, lejos de aquí, lejos de mi casa, lejos de mi hogar. Aquel que hasta ese minuto era muy difícil de desarmar. Dimos muchas batallas, en esta vida por permanecer juntos, tal vez no por amor, no sÉ por quÉ será, pero seguimos juntos a pesar de todo, soportando muchas veces de todo...

 

El golpe que recibí al caer me partió el alma en dos, quedé en un estado de eterna desolación. Vagando en este mundo buscando una explicación, la verdad era tan rotunda tan evidente, que mi mente a veces se niega a aceptar que por culpa de alguien no estés aquí.

 

Comenzamos aquel día una nueva vida, una vida sin ella de la noche a la mañana, se fue como muchos jóvenes de este país. A veces la droga, a veces el alcohol, a veces la irresponsabilidad, en fin, para arrancar la vida basta combinar abuso de alcohol y un volante raudo ligero y el resto una humanidad deshumanizada, sin conciencia ni valores, la familia solo como pantalla, para satisfacer los gustos desmedidos de un hijo, que tiene la cabeza en los pies y la neuronas en el hígado.

 

Con tu cráneo destrozado, tu personita partió, lo que mas hemos amado en este mundo alguien nos lo arrebato, y debimos aceptar "los designios de Dios", que se la llevo a un lugar mejor", ahora esta descansando.

 

Quizás algún día podré entender la razón. El por qué. Así tan de repente, no se. Pero sucedió.

 

Gabrielita era una muchachita que recién asomaba a la vida, muy dulce, muy cariñosa, sana, solidaria, de sonrisa amplia, su espíritu solidario muchas veces nos dejó sin su compañía, cuantas veces partió a cuanta campaña había, despoblando la despensa y el ropero, siempre pensando en el más pobre, siempre pensando en el más necesitado.

 

Esto es un tributo a su vida en esta vida, es un tributo a todos aquellos seres especiales que llegan a este mundo a hacerlo más bello, más sano, más puro, más solidario. A obligarnos que debemos pensar en los valores que sustentan nuestra vida y a cuidarnos de los valores que sustentan la vida de los demás, a veces a quienes vemos como buenos amigos, no lo son en realidad.

 

Ella en sus 20 años nos enseño un lenguaje diferente, el lenguaje del amor, fraterno, de la esperanza, de las ganas de luchar, el lenguaje de creer en el amigo, el lenguaje franco, de creencias en igualdad de oportunidades, un lenguaje sano transparente de verdad. Un lenguaje más espiritual.

 

Debo en este minuto agradecer a Dios por haberme elegido para ser su madre, y por aprender de ella y del amor. Por aprender que el amor todo lo puede por amor a ella es este dolor, por que la amamos es que nos duele y desgarra su ausencia.

Mi tristeza no se define con palabras, para este dolor no existe definición, no tiene tampoco una explicación.

 

No hay nada que una madre deje de hacer por sus hijos, cuando la vida doblega la dicha que pertenecía a esta familia pequeñita, pero unida, te dije un día, confía en tu madre hija, solo confía, yo soy capaz de mover el mundo cuando algo me parece injusto, los padres siempre quieren lo mejor para sus hijos, las madres lucharan hasta el final contra el enemigo mortal, no importa nada en este mundo con tal de ganar la batalla. Con la frente en alto y las manos limpias.

 

La diferencia son las armas que uno puede utilizar, mientras algunos usamos valores, otros usan la maldad, mientras algunas luchamos dando la cara, otros se disfrazan para engañar, mi lucha ha sido limpia, mis armas las legales, tengo claro mi niña que llegamos hasta donde el sistema lo permite, pero hemos dado una dura batalla y esta vez la hemos ganado, seguramente dirás de donde estés esta es la familia Duran Cortes, la que me enseño a querer.

 

La de la fe, la de la mirada simple, la de los amigos incondicionales, la que me enseño en la vida que después de la tormenta siempre sale el sol, que la esperanza es lo ultimo que se pierde. La del amor mas puro, el del amor sin doblez, la honestidad primero no importa a quien le duela, pero siempre de la mejor manera, sino démosle tiempo al tiempo, que el dará nuestra batalla, de alguna manera se aprende en esta vida cuando algo nos daña.

 

Todo mi amor para ella, y espero sinceramente que el día que Dios me llame y sea el momento de partir de este mundo sea ella la que me lleve al otro lado de la vida. Mientras viviré lo mejor que pueda, por los que aún quedan.

 

Yo aún estoy aquí con mi corazón hecho pedacitos, algunos aquí con los vivos, los que quedan y el otro allá contigo y con mi madre buena, que me enseño que en esta vida, el amor es lo primero, el amor es la fuente de la dicha y la desdicha.

 

Gracias mi niña, gracias hija, estaré aquí hasta que Dios disponga de mi. Y me preparare para cuando mi alma, siga tu camino, y seas tu quien ilumine mi senda.

 

FUENTE:       Word Press / Vuelve a Casa /


Publicado por Fisac 9:06 AM / 0 Comentarios Ver nota completaEnviar nota a un Amigo
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